Nuestro regreso al Club Swinger

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Si has estado siguiendo nuestras aventuras, seguro habrás notado nuestra aversión hacia los Clubes Swinger, sabrás también que ese sentimiento no es infundado, vaya que intentamos hacer que nos gustaran, pero por diversos factores ninguna de nuestras visitas fue satisfactoria. ¿Pues qué pasó? Bueno, ahora te haré un breve resumen. En nuestros inicios, tal como muchas parejas, probamos suerte yendo a un club Swinger , más que nada en busca de conocer parejas, en total visitamos tres de ellos, y sinceramente no fueron buenas experiencias, digamos que tenían muchas áreas de oportunidad, algunas tan simples como la limpieza y otras más complejas como la ubicación o las instalaciones. Detalles que creemos que sí hubieran hecho una gran diferencia en nuestra experiencia, sin embargo, para ser justos, hoy viéndolo en perspectiva y basado con nuestra reciente visita a un club, creemos que gran parte de esa aversión fue causada por nuestra propia actitud en ese tiempo. Pero para darte un co...

Travesuras de Mariana en el mundo vainilla



Escribo estas líneas para expresar la valentía de la que se jacta el hombre común en el mundo vainilla, ante una dama del mundo SW.


Comenzaré diciendo que la historia nace en un curso de actualización de la Universidad para la que trabajamos. El conferencista principal me resultaba atractivo, más que nada de manera intelectual, con él podía compartir charlas extensas y se hizo evidente la buena relación y química que existía entre ambas partes.

Como toda alumna respetuosa, y siendo él un profesionista destacado en su ámbito, hago saber que de mi parte existía cierta admiración.

Al finalizar el curso... y al cabo de unos meses, Leo (así lo llamaremos) tuvo el atrevimiento de contactarme con el pretexto de facilitarme información referente al curso que dio, pero sin imaginarlo los mensajes fueron subiendo de tono; de tal manera que de inmediato tuve que informar a Fer la situación; quien después de meditarlo un poco, decidió dar luz verde y continuar la dinámica de mensajes coquetos y algunos subidos de tono, dicha conversación nos permitió conocer las intenciones de este nuevo admirador.

Después de varios días de mensajes, los textos lograron tener éxito (para el interesado), acordamos ir a desayunar (él y yo solos) convirtiéndose aquello en la “Cita de su Vida“ (claro según el pensamiento Vainilla); para nuestro mundo SW se convertiría en el comienzo de “Nuestro propio Juego en pareja", con sus respectivas reglas.

Hasta aquí ambos, Fer y esta damita, disfrutábamos el juego pero... con cierta incomodidad y algunas dudas, debido a que este sujeto hasta ese momento pensaba que había estado burlándose de Fer, sin tener ni la más remota idea de la sorpresa que se llevaría en “La Cita”.

¡¡¡Y fue así... llegó el día pactado!!!

El estrés iba en aumento, esa sensación incontrolable en la boca del estómago.  Y ahí estaba yo “Mariana lista para Cazar” con una mezcla exótica der adrenalina, complicidad y riesgos, mismos que no estaría dispuesta a tomar, ya que junto con mi Fer teníamos acuerdos y reglas previstas para dicho encuentro.

Pero seré honesta, inevitablemente el nerviosismo me invadía, y nunca antes me había encontrado en una situación semejante, de tal forma que asistí muy puntual y a las 8:00 en punto tome valor e ingresé al restaurante acordado sin tener confirmación de que Leo hubiera llegado.

Tomé asiento, para mi sorpresa el sujeto no había tenido la delicadeza de ser puntual. El mesero se me acerco, me ofreció una taza de café y me pregunto si esperaba por alguien, le dije que si asintiendo solo con la cabeza y una sonrisa.

Leo se hizo notar de inmediato en el móvil... haciendo referencia a que su demora se debía a un accidente vial.... respiré y me dije a mi misma —Ok Mariana eres la mujer más impaciente del mundo, pero la situación amerita la espera.


45 min después me iba ahogando en mi propia impaciencia y en esa taza de café; hasta que Leo se hizo presente. Lo recibí con una sonrisa forzada, de inmediato se disculpó y me saludó con un abrazo afectuoso.

Debo decir, que podía ver en su mirada la actitud de un adolescente enamorado, y tanta espera me había permitido estudiar mis líneas de la mejor manera para romper aquel nerviosismo que invadía los dedos de mis manos.

Después de una breve charla trivial, lo sorprendí con mi pregunta.
— Dime por favor Leo, ¿cuál es el motivo para que estés aquí en este momento?

Sin meditarlo, respondió:
— Me encantas, pienso en ti a cada segundo, me gusta saber de ti... y bla bla bla.

Reiteré mi pregunta:
— ¿dime que sucede en tu vida para que vengas hasta aquí?

A lo que respondió:
— años de monotonía, terapia en pareja, falta de afecto...

Imagino que en ese momento él esperaba que yo cayera a sus pies, correspondiendo de la misma forma o quizá con las mismas respuestas. Lo miré llena de valor y le dije:
— ¿Sabes por qué me encuentro yo aquí, tan tranquila, sin miedo, compartiendo mesa contigo en un lugar público?

— Porque nuestros casos son muy diferentes Leo; y fue ahí donde Mariana estallaría la bomba que este sujeto ni en sus sueños hubiese imaginado.

— Que pensarías si te digo que mi matrimonio es diferente. Yo soy una mujer muy feliz, plena y enamorada de mi esposo; tanto que él sabe en este momento que me encuentro aquí, frente a ti, y sabe que me agradas, que existe buena química entre nosotros y no llegué hasta aquí para hacerte creer lo contrario, pero sí para que sepas que no quiero que te enamores de mí, porque yo amo a mi esposo! pero... así como lo amo tanto, después de varios años, dimos un giro a nuestro matrimonio con acuerdos, en vez de terapias, acuerdos donde ambos sabemos que es lo que queremos, sus fantasías, mis fantasías y tratamos de llevarlas a cabo interactuando con otras personas.

Hasta aquí lectores; podrán imaginarse el cambio de expresión de Leo empalidecido, que dio un cambio rotundo en su rostro al escucharme decir aquello. Debo decir que me sentí desahogada, ahora el ego de aquel hombre, que pasó de ser cazador a presa, se sentía amenazado por mi Fer y la nueva situación, en la que ahora estaba involucrado. 

Le hice saber que, así como yo había cedido al placer de Fer al interactuar con una chica, mi momento sería llevar a cabo la fantasía de estar con dos chicos. Mientras hablaba, su rostro cambiaba de colores, tragaba saliva discretamente para que no lo notara pero… su inquietud y sus preguntas aumentaban con el calor de la charla.

Comenzó a exponer su ansiedad y nerviosismo, preguntándome si Fer estaría escondido por ahí en otra mesa, si acaso era una broma, aquel hombre no daba crédito a lo que le estaba sucediendo. Créanme estoy segura de que su mente voló y entre más me observaba escuchándome, más se hacía notar su deseo engrandecido ante aquella situación.

Al final dejé muy en claro que esto lo hacía para aportar algo a mi matrimonio, él intentaba buscar la forma de tener un encuentro a solas conmigo, entre broma y broma, diciendo que si tenía que tramitar eso con Fer (obviamente no era opción). Me expuso su inquietud de no saber cómo iba a reaccionar si otro hombre lo estuviera mirando en el acto, y me hizo saber que, en su experiencia, nunca nadie antes le había propuesto algo semejante, lo que alimentaba más su curiosidad.

Le dije que este encuentro “El desayuno” había sido con el fin de exponerle la situación y si aceptaba, lo invitabamos cordialmente a “La Cena”; donde las dudas y más detalles se resolverían, acordando un encuentro los 3 involucrados.

Debo decir que, ante esto, no tenía la menor idea de cuál sería su respuesta, que al final terminó siendo más favorable de lo que imaginamos, y a la cual Fer le añadió sus restricciones y reglas antes de comenzar el juego.

Quisiera agregar, mis queridos Lectores, que dicho sujeto creyó tener el control de la situación antes de la cita y fue reconfortante saber que todo ese ego suyo y seguridad, lo hice mío al tomar el control de la situación e imaginar todo lo que se vuelve capaz un hombre por la dulce piel de una mujer ajena.

Aún no hemos concertado la cena, pero espero pronto poder relatarles el desenlace de esta historia.

Continuará...

Si llegaron hasta aquí, agradecemos su atención y esperamos que les haya gustado este relato que como dice Fer, escribimos como una forma de expresarnos y esperando que pueda serle útil a otras parejas que como nosotros estén incursionando en este ambiente. Nos encantaría conocer su opinión sobre este relato y sus experiencias si es que han tenido alguna situación similar.



Comentarios

  1. Ojalá y no tarde mucho el desenlace, nos gustaría saber el final.

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  2. Me encantó leer el relato desde la perspectiva de Mariana, aporta mucho su "mirada" a los que estamos iniciando.

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